INOCENCIA

A veces, hay miradas limpias, claras, que sólo miran. Sonrisas abiertas, espontáneas, que sólo ríen…

Otras veces, el fantasma de la apariencia se inmiscuye y enturbia la mirada, difumina la sonrisa… Sólo la inocencia mira y ríe libremente.

¿Cómo volver a ser inocente?

La inocencia no puede buscarse.

La inocencia no busca ser inocente, no conoce ni siquiera el nombre, no se sabe inocente.

¿Por qué tuve que aprender “lo que es la inocencia”? Justo en el momento en que pude definirla, la perdí, y al empeñarme en buscarla, me doy cuenta, de que la búsqueda nunca puede ser inocente… eterna espiral que me adentra en el laberinto.

Por eso, sólo quiero un instante, aquí en el laberinto, un minúsculo e inapreciable instante para soltar los nombres, después de haberlos tenido, soltarlos todos y dejar que la risa surja como quiera, cuando quiera, sin explicación, sin razón… y que la mirada mire, y se asombre para seguir mirando y asombrándose, sin saber por qué o de qué… un instante, sólo un instante donde nacer de nuevo, nacer sin nombre, inocente y plena, aquí y ahora.

Esta entrada fue publicada en Blog. Guarda el enlace permanente.

3 respuestas a INOCENCIA

  1. Manuel Fdez dijo:

    Me encanta!….belleza en palabras.
    Nos vemos pronto!

  2. M. Carmen Alvarez dijo:

    ¡Que bueno!, poder echar una carcajada de oreja a oreja, incluso a sabiendas de que tu dentadura ya no está para exhibirla en un anuncio de «Profiden».

  3. Matilde Jimenez dijo:

    Gracias por tan hermosa reflexión y dejarse llevar por esa inocencia que sale del corazón….
    Tengo ganas de conocerla en persona…
    Pronto presenta un nuevo libro, si no hay incoveniess pronto la conoceré.
    Matilde

Deja un comentario